Esperanto

- ¡Un momento! – Exclamó Fernando. – Jugamos con ventaja, tenemos tiempo para resolver el enigma antes de que nos lo formule Suep... si Reni lo recuerda, claro.-
- Por supuesto que me acuerdo.- Se le iluminó el rostro por primera vez. Pensó unos segundos para aclarar su mente y recitó con voz clara y pausada:

La verdad la Aumenta
y la mentira la Mata.
Desciende a los más profundos Infiernos,
y escala las más altas Sierras.
Es hallada con el Tiempo,
y aunque por todos Admirada,
por pocos Descifrada.

El joven confiaba en que su traductor fuera bueno, se palpó la piedra contra el pecho... porque descubrir la respuesta no iba a ser nada fácil.
Extracto de relato adolescente inconcluso.