Insomnes secuestrados

Conseguimos no tener que dormir y ampliaron la jornada laboral.

Entrega total

Le dijeron que sacara todo lo que llevaba dentro sobre el escenario y vomitó.

Sin dioptrías

Nos concedieron vista de águila y no pudimos seguir fingiendo que no nos veíamos por la calle.

Diván estético

Ungüentos para intentar seguir siendo quien eres. Otros para ocultarlo. Las cremas conducen a la psicosis.

Traductor Gente-Gentuza I

GENTE: Tener palabra.
GENTUZA: Inflexibilidad, rigidez, coacción.

Tiempo relativo

El resplandor que ilumina mis insomnios nace en el reloj de la mesilla. Recuerdo el rápido avanzar de los segundos aquellas primeras noches que te sentía a mi lado. Dormida, respirando. Los desvelos clavan ahora mis ojos en las horas. Lentas, adormiladas. Que se estiran para sentirte roncando.

Coordinación de gremios

Plaquetas reparando las filtraciones de la cocina. Glóbulos blancos desatascando las tuberías. Melanocitos coloreando la fachada. Serían la más perfecta cuadrilla de gremios de no estar condenadas de por vida a ser obreras de empresas mal dirigidas.

Almacenados

Cajas clasificadas ocultaban sus paredes hasta el techo. Los bañadores no tocaban los abrigos ni los amigos a la familia. Aguardaban localizados y separados por paredes de cartón. Compartimentados en celdas aisladas sin patio donde encontrarse. Condenados a no ser nunca más de lo que eran. Vetados a lo inesperado.

Incomparable

Una cama, un libro y un amigo. No aceptaba segundos ejemplares. Vivía rodeado de presencias únicas que no perdían su valor por verse sometidas a la comparación con un semejante. Si hay dos hay mejor y peor. Habiendo uno todo era bueno.

Horizontales

Somos verticales. La altura es un valor. Los edificios miran hacia arriba y las catedrales tocan el cielo. Si fuéramos horizontales la anchura sería meritoria. Las casas bajas y vastas. Entonces acercarse a Dios sería cuestión de mirar hacia delante.

Llenos

Su familia eligió llenar los armarios, las cuentas corrientes y las redes sociales. Él prefirió colmar el estómago. En aquella casa era el único que conseguía sentirse satisfecho tres veces al día.

Ponerse

En asuntos de ponerse cavilaba cuando abría el armario. Era él quien se calzaba aquellas camisas y pantalones. Incluso tenía el poder de premiar y segregar a su antojo. Sin embargo el último vistazo que le devolvía el espejo reía que la ropa se había puesto un cuerpo.

Movimiento estático

Vigilaba los kilómetros de reojo esperando el momento exacto. Ese en el que gustaba de saberse a medio camino sin la obligación de estar yéndose ni llegando. Ese en el que se movía estando quieto.

Tontalculo

Se hizo la tonta y no supo deshacerse.

Afortunado imaginario

Encontré una moneda en la calle. Estaba mirando por la ventanilla del autobús. Fue mía un instante.

Terricolada

Me han hablado de un planeta donde solo está bien visto querer a una persona. ¡Qué terricolada!

Pobre de mí

Le costaba olvidar las ofensas recibidas tanto como recordar las que había proferido. Se quedó tranquilo. Era una persona normal.

Cambio de piel

Duelen menos los golpes en piel ajena. Y decidió ser otra.