martes, octubre 14, 2014

De coplas VII: A una artesana



Kabiezes nunca vio transformación más asombrosa
La reina del baratillo floreció en artesana primorosa

Tapizada con rayas arcoíris y cuentas multicolores
Convierte lana fina en alta costura de las mejores

Si tu mesa necesita un mantel o el sofá un tapete
Ella desenvaina las agujas para tejer en un periquete
                                                                                                        
Rechaza encargos de acaudalados clientes lejanos
Imposible poner precio al arte hecho con las manos

Zamora y Santurce quieren nombrarla hija predilecta
Aceptará si le ponen una calle y hacen buena colecta

De China, Japón y Corea llegaron miles de imitadores
Ninguno descubrió el secreto de sus increíbles dones

Dedos mágicos
Lengua venenosa
Rizos clásicos
Alma salerosa
Así es ella
Siempre hermosa

domingo, octubre 12, 2014

De coplas VI: A una asesora financiera



Una mujer atada al teléfono
Una voz que habla y escucha
Acabó tan harta de disgustos
Que huyó corriendo a la Kutxa

Maneja euros a golpe de tecla
Te presta cien mil para la casa
Y con una sonrisa encantadora
Piensa: “De dos años no pasa”

En acciones o letras del tesoro
Te dice cómo invertir tu dinero
Pero si quieres sacarle partido
Mucho mejor gastarlo primero

Madre de tres niños diferentes
Que le alegran las mañanas
Dos deseando crecer rápido
Y otro rejuveneciendo a cañas

Quemando horas con energía
Sin que ninguna se derroche
Y sabiendo que a última hora
Pasarás una apasionada noche

De coplas V: A una lingüista



Idiomas y cervezas
Absorbes rápidamente
El cóctel perfecto
Para lidiar con la gente

Euskera de txozna
Y castellano de Egia
La lengua más afilada
De noche y de día

Inglés de videoclip
Y francés parisino
Guerra al incompetente
Para que trabaje fino

Alemán de Deusto
Y gestos reveladores
De tonta ni un pelo
Tirando dardos y flores

Plurilingüe y completa
Irresistible torbellino
El terror de Osakidetza
Y que tiemble el vecino

Super batería implantada
Plutonio en las venas
En las alegrías explosiva
Incombustible en las penas

De coplas IV: A una ilustre fregona



Te abren todas las puertas
Tuyos son hasta los rincones
Para quitar la capa de polvo
En baldas, armarios y cajones

La reina de muchas casas
Que manejas con remango
Cuando las jefas desaparecen
Sólo tú quedas al mando

Precursora de yihadistas
Decapitas sin temblor de mano
Mientras dejas limpias y listas
Camas ajenas todo el verano

Llaves cuelgan de tu cintura
Cuando friegas platos y vasos
No son una pesada carga
Sólo la música de tus pasos

Ajena a lo que te rodea
Imaginas brillo en el aire
Un mundo solo tuyo
Que nadie podrá quitarte

Sin abrir

Caduqué en tu despensa.